Mes de Concientización sobre la Prematuridad

Noviembre es el Mes de la Concientización sobre la Prematuridad, lo que hace que sea un buen momento para compartir información sobre prevenir el trabajo de parto prematuro. También es un buen momento para apoyar a las mamás que dan a luz de forma prematura.

Algunos bebés nacen semanas o meses antes, lo que puede resultar estresante y atemorizante. A muchos bebés prematuros les va bien, especialmente aquellos que nacen más cerca de sus fechas de parto. Pero algunos bebés prematuros tienen problemas duraderos, como parálisis cerebral o problemas de aprendizaje. No siempre es posible evitar un parto prematuro, pero es importante conocer las señales del trabajo de parto prematuro y lo que ayuda a reducir el riesgo.

Las señales del trabajo de parto prematuro

El trabajo de parto que comienza antes de la semana 37 del embarazo se denomina trabajo de parto prematuro o temprano. Eso es tres semanas antes de la fecha de parto. Hay tratamientos que pueden ayudar a retrasar o detener el trabajo de parto prematuro.

Llame a su médico o clínica de salud de inmediato si percibe alguna de estas señales antes de la semana 37 del embarazo:

• Dolor sordo, presión o dolor en la parte inferior de la espalda
• Calambres similares a los de la menstruación
• Presión en la pelvis que se siente como si el bebé empujara hacia abajo
• Calambres en los intestinos, con o sin diarrea
• Cualquier cambio en la secreción habitual de la vagina, especialmente si es espesa, acuosa o sanguinolenta
• Dolor de cabeza intenso, visión borrosa, destellos en la visión o acidez estomacal intensa. Estos pueden ser síntomas de una complicación llamada preeclampsia.
• El bebé parece estar moviéndose menos de lo habitual y usted siente menos de 10 movimientos por hora

Reducir sus probabilidades de trabajo de parto prematuro y nacimiento prematuro

Realizarse chequeos regulares y no fumar durante el embarazo son dos formas importantes de reducir las probabilidades de un trabajo de parto prematuro. Además, los estudios muestran que las mujeres que esperan al menos 18
meses entre un embarazo y otro son menos propensas a dar a luz de forma anticipada.